Hay días en los que te levantas y sufres la llamada "Crisis de armario", ves lo de todos los días, pero lo que antes te gustaba ya no te gusta tanto, lo que te pruebas no te gusta como te sienta y sientes una necesidad imperiosa de salir inmediatamente de compras porque con lo que tienes no te pones ni un conjunto medio decente. Menos mal, que todo pasa, y al día siguiente vuelves a pensar con algo más de claridad. 

Se ve que esta "dolencia" es común a todas las mortales (a los hombres no les suele pasar, porque a ellos que mas les da que el negro no vaya con el azul marino), aunque claro, si eres una celebritie y ese mal día va a perseguirte toda la eternidad, mejor pensártelo dos veces antes de salir con según que cosas. Aquí van tres casos muy claros:

1.- Mel B: Nunca se ha caracterizado por su glamour y estilo, mas bien por todo lo contrario, pero lo que se pudo ver en la presentación de ese restaurante sobrepasó todos los límites. Ese sujetador Primarkiano recargado, que siempre que lo ves en las tiendas dices....quien llevará eso?...Las guiris fijo, y así es. Y para que contarte el vestido playero y esa actitud de colegiala juguetona.

2.- Rihanna: Cuando ya no sabes donde está el límite entre atrevida y pasada de rosca, pasa lo que le pasa a Rihanna. Vale que vayas con estampado felino día si y día también, vale que lleves unas sandalias que por muy de firma que sean horrorizan a cualquiera, pero decidir salir como Norma Duval en sus tiempos mozos, yo no le encuentro lógica alguna. Y ya el detalle de los pendientacos es muy fuerte¡¡

3.- Lady Gaga: Ha nacido para llamar la atención, pero cuando ya creíamos que habíamos visto todo, aparece con este vestido hecho de pelo, con bolso en forma de perro peliteñido a juego. Creo que en este caso, no hacen falta más comentarios.

¿Creéis que el dinero y la fama os convertiría en víctimas de la moda? ¿Deberían las famosas pensárselo mejor antes de salir a la calle?