Lo prometido es deuda, y antes de que se me olviden todos los detalles, me he decidido a hacer este post que seguro que a muchos/as os es de utilidad.

Fue en agosto cuando decidimos irnos una semana a Lanzarote. Yo era la cuarta vez que estaba, pero ni Greta ni Dani habían estado, así que era hora de poner rumbo a las Canarias, y yo siento una especial predilección por esta isla. Conozco también Gran Canaria, Tenerife, La Gomera y Fuerteventura, pero sin duda Lanzarote para mi tiene todo lo necesario para pasar unas vacaciones inolvidables, con actividades diferentes, contraste y muy buen clima.



Octubre es una época genial, alargas el verano peninsular, las temperaturas son buenas pero no agobiantes y puedes disfrutar de días de playa y días de turismo sin sudar la gota gorda. En otras ocasiones he estado en pleno verano que se nota que hay mucha más gente, y también en Marzo, que pese a hacer mucho mejor que en la península, es más complicado tener días puramente de playa.

VUELO

El vuelo lo hicimos con Ryanair, y pese a que mucha gente no le gusta esta compañía por sus restricciones de equipaje, yo encuentro que es de las más puntuales y que, dándote a elegir , cada cual que facture lo que quiera. Nosotros no facturamos nada, conseguí meter en mi maleta de mano mi ropa y la de Greta sin problema. Aparte te dejan llevar un bolso y para la niña una pieza de hasta 5 kilos con lo necesario para cambiarla, darla de comer, además del carrito y si lo necesitas, otra pieza más como puede ser portabebés o cuna portátil. Tenéis toda la información sobre viajar con menores de dos años en Ryanair aquí.

Nosotros lo único que pagamos fue elegir el asiento para asegurarnos ir juntos. Nos bajaron las maletas de mano y el carro a la bodega, y para mí, fue más cómodo, porque ya bastante tienes con preocuparte de la niña, como para tener que estar también tirando de las maletas de mano. El carro en función del aeropuerto, te lo dan a la salida del avión, como pasó en Lanzarote, o bien en cinta, como pasó en Barajas.

Mi mayor miedo tanto en el vuelo de París como en este era cómo se iba a portar estando varias horas quieta sin poder andar y jugar, pero debe de ser que el movimiento del avión la deja KO, que se quedó dormida casi todo el vuelo, tanto de ida como de vuelta, una maravilla. También es verdad, que al seguir dándola el pecho, es un as en la manga que siempre funciona.

ALOJAMIENTO

En las ocasiones que he estado en Lanzarote me he alojado tanto en Costa Teguise como en el Puerto del Carmen, y en esta ocasión preferí el Puerto del Carmen. Me gusta más la playa y pese a que las distancias son cortas, está más céntrico para ir a la mayoría de los destinos de la isla. Playa Blanca lo descarté porque hay más hoteles con todo incluido y creo que tiene menos ambientillo, se hace más vida de hotel que de calle.

El hotel que elegimos fue el Gloria Izaro Club Hotel en régimen de media pensión porque con Greta tendríamos mas variedad para sus desayunos y comidas y así también nos quitábamos de cocinar y disfrutábamos de unas verdaderas vacaciones. Cuando viajamos, solemos decantarnos por apartamento, pero en esta ocasión que estaba esta opción de aparthotel, nos pareció la más cómoda y desde luego fue la mejor elección. El hotel una maravilla, el trato fue sumamente amable y es totalmente baby friendly. Lo recomiendo totalmente, además el precio es buenísimo. Nosotros lo cogimos a través de Booking porque tenía cancelación gratuita, pero el precio en su propia web era algo más barato, lo único que no tenía cancelación gratuita.

QUÉ VER EN LANZAROTE

Lanzarote es una isla volcánica en la que han sabido sacar el máximo provecho, y mucha culpa de esto la tiene Cesar Manrique, que fue el arquitecto de las principales atracciones turísticas de la isla

- Jardín de Cactus

Fue nuestra primera parada, y aunque no tiene unas grandes dimensiones, César Manrique aprovechó una cantera para alojar este jardín en terrazas con una gran variedad de plantas. Todo está impecable, bonito y cuidado. Os recomiendo tomaros algo en la terraza que hay dentro. Los precios son bastante normales y las vistas merecen la pena.
En cuanto a la entrada, cuesta 5,80€, pero como íbamos a ver varias cosas de la isla, cogimos una entrada combinada de cuatro visitas: Jardín de Cactus, Jameos del Agua, Cueva de los Verdes y Timanfaya, que nos costó 28€ por adulto. Los niños menos de tres años no pagan en ningún sitio.

Carrito: Para recorrer el jardín se puede hacer con el carro, pero hay escaleras y el suelo es irregular.



- Jameos del Agua

Otra de las obras de César Manrique que aprovechó el desplome del techo de un tubo volcánico para crear este lugar en el que se abrazan la naturaleza y el hombre. Un lugar que transmite paz y calma en el que habitan sus famosos cangrejos ciegos, una especie endémica de los Jameos.

Carrito: Para esta visita yo recomiendo dejar el carrito en el coche, hay escaleras para acceder y la zona dónde están los cangrejos es demasiado estrecha y concurrida como para ir con carro.



- Cueva de los Verdes

Una cueva que no es cueva, ya que se trata de un tubo volcánico que tiene entrada y salida y mide aproximadamente 7km, aunque la parte que se visita sólo abarca uno. Fue utilizada como escondite de la población frente a los ataques e invasiones de los piratas procedentes del norte de África durante los siglos XVI y XVII y hoy, gracias a la mano de Jesús Soto, estrecho colaborador de César Manrique, que desplegó todo su conocimiento del tratamiento de la luz y la sombra para extraer la luminosidad de la piedra y realzar las formas caprichosas que la lava, se puede disfrutar de este lugar mágico.

Carrito: Al tratarse de una cueva no se puede hacer la visita con el carro.

- Mirador del Río

Nosotros no hicimos esta visita, ya que hay unas vistas muy buenas desde justo al lado. Lo que se ve desde este punto es la isla de La Graciosa. Si tenéis tiempo, puede ser una excursión atractiva. Yo la hice hace años y nos gustó. Es una isla casi virgen con playas de aguas muy claras y bastantes peces. Naturaleza en estado puro.



- Montañas de fuego / Timanfaya

Uno de los Parques Nacionales más visitados de España, y es que un paisaje volcánico que recuerda a Marte, no se ve todos los días. La visita se hace en autobús por los principales puntos del parque, viendo ríos de lava, cráteres y un paisaje árido con el mar de fondo. Una vez en el centro de visitantes se pueden ver diferentes demostraciones aprovechando los 300 grados de temperatura de la tierra a tan sólo diez metros de profundidad. Una maravilla, Greta alucinó.

Carrito: Al ser una visita mayoritariamente en autobús, es mejor no sacarlo.

- El Golfo

En esta zona se encuentras las Salinas de Janubio, los Hervideros y el Charco de los Clicos o laguna verde, a muy poca distancia unas de otras. Nosotros nos decantamos por visitarlas antes de ir a Timanfaya, una ruta bonita dónde la naturaleza cobra todo el protagonismo.

Si os da la hora de comer por la zona, en el pueblo de El Golfo os recomiendo Casa Rafa y La Lapa. Buen pescado y marisco de la zona.



- Playa Papagayo

Dicen que es la más bonita de la isla, y yo lo confirmo. En las anteriores ocasiones no había estado y tenía ganas de conocerla. Para acceder hay que seguir un camino un tanto movido de unos 15 minutos y pagar 3€ ya que se trata de un entorno natural protegido. La más conocida es Papagayo pero también se puede acceder a Playa Mujeres. Agua cristalina, arena fina y muchos peces. Una mañana perfecta!

Para acceder a la playa hay que seguir un camino no muy difícil, pero de nuevo, es mejor dejar el carrito en el coche.



- La Santa y Famara

Son zonas de surfista, el aire en esta zona de la isla azota con más fuerza generando más olas. Nosotros nos acercamos después de Timanfaya y el paisaje, sobre todo al caer el sol es espectacular.



- La Geria

Es la zona de viñedos de la isla, con su peculiar forma de cultivo en terrazas protegidas por piedra volcánica. En la zona hay muchas bodegas que merecen una visita y degustar un vino de la zona. Nosotros pasamos por la zona para admirar el paisaje, pero no paramos en ninguna bodega porque con Greta no era la mejor opción.

- Mercadillo de Teguise

Se celebra los domingos y es uno de los más extensos en los que he estado. Muchísimos puestos de artesanía local, productos de aloe vera, vinos y demás manjares isleños y también con productos más habituales en cualquier mercadillo que se precie. El pueblo merece visita otro día que no haya mercadillo pues se admira mucho mejor y con mayor tranquilidad. Se considera uno de los cascos históricos mejor conservados de las Canarias.

- Fundación César Manrique

Y ya que César Manrique dio tanto a la isla, no se puede ir uno sin visitar su fundación, que se encuentra en la que fue su vivienda durante más de 20 años, y que construyó en una colada volcánica aprovechando cinco burbujas en las que alojó las estancias. Una maravilla en la que la naturaleza se abraza con la arquitectura de una manera magistral.

Carrito: Se puede acceder, pero al iniciar la visita tienes que aparcarlo puesto que es además museo y hay que subir y bajar escaleras, por lo que mejor no llevarlo.

Espero que no os haya aburrido el post y os sea de utilidad. Si tenéis cualquier duda, aquí estoy, y si es algo importante, lo añadiré para que el post quede lo más completo posible.